11.28.2010

mejor me quedo como estoy

Hace hoy 9 años me operaron de corazón. Era un problema congénito que en palabras textuales del médico "lo resolvía con una mano atada a la espalda" a pesar de que ya era un caso grave (de hecho mi parte derecha del corazón es más grande de lo normal).

Momentos antes de entrar a darme una sesión de rayos X un día antes de la operación, miré por la ventana del hospital y me pegó un "flasazo" de cordura: "y si mañana estiro las punteras en la operación?". Por suerte (*) estuve dentro del 99% de pacientes que salen vivos y coleando.

Sin embargo, ese momento se quedó bien fijado en mi cabeza y evolucionó a peor, tuve unos meses en los que pensé que aquello no podía haber ido tan bien como los médicos decían y que tal vez el parche que me pusieron se soltaría y moriría el día menos pensado.

Los meses que aquella idea peregrina duraron (el tiempo dio la razón a los médicos) han sido, con mucho, los meses más felices de mi vida.

Y este post es para leermelo cuando tenga que tomar alguna decisión importante y piense: "mejor me quedo como estoy".

(*) en realidad no fue suerte, fue gracias al trabajo de mucha gente durante años y posiblemente de muchos muertos con el mismo problema que yo.


2 comentarios:

JM dijo...

Tengo una amiga que hace más de un año le encontraron un cáncer terminal, metástasis por todo el cuerpo. Los médicos no se molestaban ni en darle tratamiento paliativo. Ella se empeñó, quería intentarlo, y ahora parece que el cáncer está dormido, no curado, pero sí hibernado.
Lo asombroso: ver con qué intensidad está viviendo este año. Ves la actitud con que se toma la vida y alucinas de la fuerza y optimismo que transmite.
Moraleja: nos solemos olvidar de lo importante que son ciertas cosas cotidianas, y no por ser cotidianas dejan de ser importantes. Y el gran reto es tenerlas presentes en el día a día, no olvidar su valor sin que sea necesario que ver que corren peligro.

Me gusta el tono de tu blog últimamente. (:

Anónimo dijo...

Me inspiras.